El escritor que integró el equipo de guionistas del programa ‘La Bola de Cristal’ medita acerca del sentido de la lectura y la necesidad de inculcarla a los niños desde la más temprana edad.
[...]
-¿Existe la literatura para niños o jóvenes más allá de la literatura específica para ellos?
- Me temo que esos cortes -de edad, de género, de etnia- tienen que ver sobre todo con la explotación especializada de franjas de consumo. El resultado es la enorme hipocresía de una sociedad que se sentimentaliza en lugares separados, a determinadas horas, mientras apoya guerras o desprecia a los inmigrantes y entrega a sus niños, en una especie de sacrificio ritual, a las multinacionales capitalistas. Por lo demás, los criterios para establecer estas separaciones son errados. Si pensamos en el cine, creo que las películas de Walt Disney, como los libros de Sade, deberían estar reservadas para adultos bien preparados que pudiesen protegerse de sus hechizos corruptores. Lo que sí es claramente para adultos es el mundo; y no hay apenas adultos para gestionarlo o analizarlo.
[...]
-¿Y qué significa entretener?
- Yo diría que, asociado a la llamada industria del entretenimiento, tiene el sentido muy claro de quedarse en el camino, a medio camino. Se nos entretiene, se nos mantiene con vida -como se habla de manutención de un cuerpo o un motor- en una especie de pasillo donde no pasa nada: donde las cosas y sus imágenes se limitan a pasar delante de nuestros ojos, sin que podamos atraparlas o compartirlas.
-Si la cultura es sólo entretenimiento, ¿para qué sirve?
-El peligro está en confundir cultura con mercancías culturales, las cuales -como todas las mercancías- son la negación misma de la cosa que nombran y parecen llevar dentro. De hecho, verdadera cultura, hoy en día, sólo se produce contra el mercado, incluso cuando, a veces, es asimilada o difundida por él. Como el mercado no es puritano acepta también las cosas buenas. Pero las cosas buenas nacen siempre en otra parte. Cultura es cualquier operación orientada a reproducir el medio propiamente humano de la humanidad y por eso es más cultural una madre que cose un botón que la llamada Alta Costura.
-¿Hacia dónde va la lectura?
-No hay que equivocarse: a la lectura nunca le ha ido demasiado bien. Leer es un trabajo y ya Cicerón se quejaba de lo poco que leían los romanos cultos. Ha sido sin embargo una posibilidad maravillosa -de democratización y racionalización de la humanidad- que no llegaremos a agotar. Mucho antes de que el mundo entero esté alfabetizado y mucho antes de que sea realmente "letrado", se nos exige incorporarnos a un nuevo paradigma, el digital, del que sólo sabemos que subvierte nuestra forma de abordar la realidad, y de abordarnos a nosotros mismos.
Leer más...
[...]
-¿Existe la literatura para niños o jóvenes más allá de la literatura específica para ellos?
- Me temo que esos cortes -de edad, de género, de etnia- tienen que ver sobre todo con la explotación especializada de franjas de consumo. El resultado es la enorme hipocresía de una sociedad que se sentimentaliza en lugares separados, a determinadas horas, mientras apoya guerras o desprecia a los inmigrantes y entrega a sus niños, en una especie de sacrificio ritual, a las multinacionales capitalistas. Por lo demás, los criterios para establecer estas separaciones son errados. Si pensamos en el cine, creo que las películas de Walt Disney, como los libros de Sade, deberían estar reservadas para adultos bien preparados que pudiesen protegerse de sus hechizos corruptores. Lo que sí es claramente para adultos es el mundo; y no hay apenas adultos para gestionarlo o analizarlo.
[...]
-¿Y qué significa entretener?
- Yo diría que, asociado a la llamada industria del entretenimiento, tiene el sentido muy claro de quedarse en el camino, a medio camino. Se nos entretiene, se nos mantiene con vida -como se habla de manutención de un cuerpo o un motor- en una especie de pasillo donde no pasa nada: donde las cosas y sus imágenes se limitan a pasar delante de nuestros ojos, sin que podamos atraparlas o compartirlas.
-Si la cultura es sólo entretenimiento, ¿para qué sirve?
-El peligro está en confundir cultura con mercancías culturales, las cuales -como todas las mercancías- son la negación misma de la cosa que nombran y parecen llevar dentro. De hecho, verdadera cultura, hoy en día, sólo se produce contra el mercado, incluso cuando, a veces, es asimilada o difundida por él. Como el mercado no es puritano acepta también las cosas buenas. Pero las cosas buenas nacen siempre en otra parte. Cultura es cualquier operación orientada a reproducir el medio propiamente humano de la humanidad y por eso es más cultural una madre que cose un botón que la llamada Alta Costura.
-¿Hacia dónde va la lectura?
-No hay que equivocarse: a la lectura nunca le ha ido demasiado bien. Leer es un trabajo y ya Cicerón se quejaba de lo poco que leían los romanos cultos. Ha sido sin embargo una posibilidad maravillosa -de democratización y racionalización de la humanidad- que no llegaremos a agotar. Mucho antes de que el mundo entero esté alfabetizado y mucho antes de que sea realmente "letrado", se nos exige incorporarnos a un nuevo paradigma, el digital, del que sólo sabemos que subvierte nuestra forma de abordar la realidad, y de abordarnos a nosotros mismos.
No comments:
Post a Comment