Los Trabajadores de la Luz son almas que llevan el fuerte deseo interior de esparcir Luz (conocimiento, libertad, y amor) sobre la tierra. Ellos sienten esto como su misión.
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Han vivido muchas vidas en la tierra en las cuales estuvieron profundamente involucrados con la espiritualidad y/o religión. Ellos estuvieron presentes en números abrumadores en las viejas órdenes religiosas de su pasado, como monjes, monjas, ermitaños, psíquicos, brujas, chamanes, sacerdotes, sacerdotisas, etc. Ellos fueron aquellos que proveyeron de un puente entre lo visible y lo invisible, entre el contexto diario de la vida terrestre y los reinos misteriosos del más allá, de Dios y los espíritus del bien y el mal. Por cumplir este papel, a menudo fueron rechazados y perseguidos.
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Los trabajadores de la luz pueden estar atrapados en los mismos estados de ignorancia e ilusión como cualquier otro.
Aunque ellos comienzan desde un punto diferente de partida, sus capacidades para romper con el miedo y la ilusión con el objeto de alcanzar la iluminación pueden ser bloqueadas por muchos factores. (Por iluminación queremos decir el estado del ser en el cual ustedes comprenden que son esencialmente de Luz, capaces de elegir la luz en cualquier momento).
Uno de los factores que se hallan interrumpiendo el camino a la iluminación para los trabajadores de la luz es el hecho de que ellos llevan una pesada carga kármica, la cual a veces puede llevarlos a extraviarse por bastante tiempo.
Esta carga kármica está relacionada con decisiones que ellos alguna vez tomaron con relación a la humanidad en sus etapas infantiles. Estas decisiones fueron esencialmente irrespetuosas de la vida. Todos los trabajadores de la luz que viven ahora desean corregir algunos de sus errores pasados y recuperar y apreciar lo que ha sido destruido a causa de ello.
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Han vivido muchas vidas en la tierra en las cuales estuvieron profundamente involucrados con la espiritualidad y/o religión. Ellos estuvieron presentes en números abrumadores en las viejas órdenes religiosas de su pasado, como monjes, monjas, ermitaños, psíquicos, brujas, chamanes, sacerdotes, sacerdotisas, etc. Ellos fueron aquellos que proveyeron de un puente entre lo visible y lo invisible, entre el contexto diario de la vida terrestre y los reinos misteriosos del más allá, de Dios y los espíritus del bien y el mal. Por cumplir este papel, a menudo fueron rechazados y perseguidos.
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Los trabajadores de la luz pueden estar atrapados en los mismos estados de ignorancia e ilusión como cualquier otro.
Aunque ellos comienzan desde un punto diferente de partida, sus capacidades para romper con el miedo y la ilusión con el objeto de alcanzar la iluminación pueden ser bloqueadas por muchos factores. (Por iluminación queremos decir el estado del ser en el cual ustedes comprenden que son esencialmente de Luz, capaces de elegir la luz en cualquier momento).
Uno de los factores que se hallan interrumpiendo el camino a la iluminación para los trabajadores de la luz es el hecho de que ellos llevan una pesada carga kármica, la cual a veces puede llevarlos a extraviarse por bastante tiempo.
Esta carga kármica está relacionada con decisiones que ellos alguna vez tomaron con relación a la humanidad en sus etapas infantiles. Estas decisiones fueron esencialmente irrespetuosas de la vida. Todos los trabajadores de la luz que viven ahora desean corregir algunos de sus errores pasados y recuperar y apreciar lo que ha sido destruido a causa de ello.